Penny Lane, la protagonista del libro, vivió una experiencia que le hizo reflexionar acerca de los hombres y tomar una decisión importante.
Su actual novio, una persona que conocía de toda la vida y a quien tenía muchísimo afecto, le había estado siendo infiel a sus espaldas y un día, un día importante para ella (no voy a decir por qué), lo descubrió in fraganti. A raíz de este punto, tomó una decisión que le cambió la vida a mejor. Decidió formar un club al que llamó el club de los Corazones Solitarios. Evidentemente, esto trajo sus consecuencias: una pequeña (o no tan pequeña) revolución en sus instituto que hacía a las niñas plantearse su relación amorosa.
La protagonista, durante todo el libro, reflexiona sobre el tema como líder del club sobre todo a raíz de agentes externos que la presionaban por dos extremos.